Para los más Peques.

El control de esfínteres

Para acostumbrar al niño a utilizar el orinal o el wc (prescindir del pañal), es necesario esperar a que alcanze la maduración neurológica que le permita controlar voluntariamente los esfínteres.

Intentarlo antes es inútil, incluso puede provocar ansiedades y conflictos durante largo tiempo.
Primero se adquiere el control del esfínter anal (control de las deposiciones), entre los 18 y los 24 meses, seguido el control de esfínter uretal (control de la micción), en un primer momento tan solo durante el día y al cabo de unos seis meses, también por la noche. Sólo en esta época es posible empezar a proponer el abandono del pañal, gradualmente y sin ponerse metas y fechas obligadas.
Una vez adquirido en control de los esfínteres, puede perderse momentaneamente a causa de enfermedades o cambios ambientales o familiares poco significativos para el adulto, pero muy importantes para el niño.
Aunque por un lado es importante no exigir al niño que adquiera hábitos que no puede asegurar por falta de madurez neurológica, por otro es oportuno ayudarle e incentivarle a aprender nuevos hábitos acordes con su edad y no intentar retrasarlos esperando evitar que se enfrente con los inevitables inconvenientes del aprendizaje como hacerse pis encima, en la cama , etc.

Antaño, la incomodidad de lavar muchos pañales de tela era uno de los motivos por los que impulsaban a adelantar inoportunamente este aprendizaje; hoy en día, el verdadero inconveniente es enseñar al niño, porque estamos demasiado ocupados; pero no hay que olvidar que el más perjudicado por esa falta de atencion es el niño. Esta desatención, puede causar falta de autonomía personal y baja autoestima